Mira
Lo que voy a decir puede parecer una flipada.
Pero…
Los entrenamientos más recordados son los que tienen nombre propio.
¿Quién no se acuerda de hacer el famoso test de Cooper?
O el entrenamiento Tábata, o el circuito Oregon.
Esto se ha llevado al extremo en el Crossfit en el cual hay nombres propios de entrenamiento como: Anne, Cindy, Fran, Karen, Linda…
Por no decir los AMRAP, EMOV y demás
Por ejemplo, en la aplicación de entrenamiento Freeletics, los nombre de los entrenamientos son de dioses y diosas griegos.
Incluso Arnold Schwarzenegger tiene un ejercicio con su nombre, el Press Arnold
Y… ¿por qué te cuento esto?
Porque al poner nombre a tus entrenamientos los haces más memorables, más épicos, más recordados.
Además, creas tu propio mundo.
Yo por ejemplo todas las semanas intento hacer Los 14 kilómetros de la suerte, es una especie de ritual, un entrenamiento que tengo que hacer sí o sí.
Hago lo mismo con las series o los fartlek.
En el caso de los fartlek les pongo el nombre de dónde lo he hecho, uno que suelo hacer casi todas las semanas es el Fartlek Paraninfo o las series en el CAR del botánico
Puede parecer una chorrada, pero al ponerle nombre propio a los entrenamientos salen mejor, te motivas más, te vienes arriba
Así que para la próxima vez, si te viene a la cabeza un nombre para un entrenamiento, pónselo.
Y tu querido corredor/a ¿le pones nombres a los entrenamientos?
Escríbeme a hola@correr.run y cuéntamelo.
Que pases un gran día
Mariano
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