Una de las preguntas que más me hacen (y que seguro que tú también has pensado alguna vez) es:
“¿Cuántos días a la semana debería correr?”
Y claro… la respuesta es la de siempre: depende.
Depende de tu tiempo, de tu cuerpo, de tus ganas… y de si en casa no te miran raro por salir otra vez con las zapas puestas.
Porque no todos tenemos la misma agenda ni el mismo punto de partida.
Algunos pueden entrenar casi a diario.
Otros tienen que hacer encaje de bolillos para meter tres salidas a la semana.
Y otros… bueno, otros llevan tres días “haciendo tapering” sin saber muy bien por qué.
En principio, con tres días a la semana puedes progresar mucho.
Sí, tres.
Siempre que esos tres sean diferentes y no un “copiar-pegar” del día anterior.
El problema no es tanto cuántos días corres, sino que muchos hacen todos igual:
Mismo recorrido, mismo ritmo, mismos kilómetros… y claro, luego se preguntan por qué no mejoran.
A eso súmale:
– No hacer fuerza porque “ya corro bastante”
– No trabajar movilidad porque “se me olvida” (siempre)
– No descansar porque “me da cosa parar” (y la lesión, cuando llega, no pregunta)
La clave está en estructurar:
– Un día de calidad (series, intervalos, fartlek).
– Un día suave de verdad (sí, suave de verdad).
– Un día de tirada larga o ritmos controlados.
Y si añades dos sesiones de fuerza y algo de movilidad, no solo vas a correr mejor, sino que vas a durar muchos más años sin que el fisio se convierta en tu mejor amigo.
Correr más no siempre es correr mejor. Y a veces, menos días pero bien planteados… te hacen avanzar más rápido.
Que pases un gran día
Mariano
PD1: Tres días bien trabajados ganan a cinco “porque sí”
PD2: Si este email te ha hecho pensar en alguien, reenvíaselo. Y si aún no está en la lista, puede apuntarse aquí 👉🏻 https://correr.run/
Únete a la newsletter que leen cientos de corredores populares
Motivación diaria en tu buzón para correr más y mejor