Hoy te quiero contar una historia curiosa.
Es la historia de un hombre que lleva corriendo, escucha bien, 50 años seguidos.
Sin fallar ni un solo día.
Pico y pala.
Se llama Robert, aunque todos lo conocen como Raven.
Su propósito en la vida es claro: correr.
Y vaya si lo cumple.
Desde el 1 de enero de 1975, ha salido a correr cada día, sin importar si había cumpleaños, bodas o incluso funerales.
Ha acumulado 18,250 días consecutivos corriendo.
Su historia es increíble, pero más allá de los números, es lo que representa lo que te quiero mostrar.
Raven empezó a correr tras un momento complicado de su vida.
Volvía de Nashville, donde intentaba ganarse la vida como compositor de música country. Fue en un gimnasio, el mismo que frecuentaba Muhammad Ali, donde unos boxeadores lo animaron a correr.
Lo apodaron Raven porque siempre vestía de negro, y así comenzó todo.
Día tras día, kilómetro tras kilómetro, descubrió que correr era más que un hábito: era su salvación.
A sus 24 años, correr le ayudó a superar una mala racha.
Hoy, con más de cinco décadas de constancia, inspira a miles.
Cada mañana, Raven corre por las playas de Miami y no lo hace solo: gente de todo el mundo lo acompaña.
Es un ejemplo de compromiso. Un recordatorio de que, cuando tienes un propósito claro, eres imparable.
Y tú, ¿tienes un propósito que te impulsa cada día? Si no, no pasa nada. La constancia no se crea de la noche a la mañana, pero se puede construir paso a paso.
Si necesitas ayuda para establecer ese hábito que tanto deseas, escríbeme a: hola@correr.run
Que tengas un gran día,
Mariano
P.D: Si quieres saber más sobre la fascinante historia de Raven, te dejo su web
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