No siempre vas a tener ganas.
No siempre vas a salir con una sonrisa.
Y no, no siempre vas a encontrar motivación en frases de Instagram.
Correr es maravilloso, sí. Pero también es duro.
Especialmente esos entrenamientos largos, solitarios, o los que tocan justo cuando tu cabeza está en otro sitio.
Es ahí donde muchos tiran la toalla.
Y no es por falta de disciplina.
Es porque nadie te enseña qué hacer cuando correr deja de apetecer.
Para esos días, tengo 6 trucos. No son fórmulas mágicas. No son hacks sacados de una lista viral.
Son cosas simples que uso yo, que usan otros corredores, y que funcionan cuando hace falta un empujón.
1. Ponte música
La música es una droga legal. Una buena canción lo arregla todo.
Te conecta. Te transforma. Te lleva.
Hay playlists específicas para correr, para ritmos concretos, para sacar lo mejor de ti.
Un estudio (no recuerdo dónde lo leí) decía que una buena selección de música puede mejorar el rendimiento hasta un 15%.
2. Escucha una historia
Las tiradas largas se hacen bola.
Si es tu caso, prueba con un podcast o un audiolibro.
Hay miles. Y algunos duran menos de dos horas. Perfectos para acompañarte.
3. Usa tu imaginación
Si no te van los auriculares, aún tienes un recurso más potente: tu cabeza.
Puedes revivir momentos felices, visualizar metas, repasar cosas pendientes.
En carreras donde no permiten auriculares, esta práctica te entrena la cabeza. Vale por dos.
4. Divide la carrera
Divide y vencerás.
Maratón: bloques de 10k. Media: de 5 en 5.
Cuando llegues a cada hito, solo piensas: “uno menos”. Funciona.
5. Visualiza
Visualízate corriendo esa carrera.
Visualiza el entorno. El ambiente.
A ti cruzando la meta, cansado pero contento.
Hazlo tantas veces como necesites. Porque eso, al final, pesa. Para bien.
6. Entrena acompañado
¿Tirada larga a la vista? ¿Series duras? Hazlas con alguien.
Cuando lo haces con gente, lo das todo.
Un amigo puede ser el empujón justo en el momento justo.
Estos son los trucos que uso cuando el cuerpo no quiere y la cabeza tampoco.
No hacen milagros. Pero ayudan.
Y a veces, con que algo te ayude un poco… ya es suficiente.
Si ves que necesitas un cable, escríbeme a hola@correr.run y veo como puedo ayudarte.
Un abrazo,
Mariano
PD: Si necesitas un truco más, dímelo y te lo paso. Tengo alguno en la recámara.
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