No sé si lo has visto.
Pero el otro día se juntaron en la línea de salida el mejor pertiguista del mundo, Mondo Duplantis, contra el mejor vallista de 400, Karsten Wharholm.
Fue un gran espectáculo, un momento sujétame el cubata.
El caso es que Red Bull patrocinaba un evento de exhibición en el cual pusieron a competir a estos dos atletas en los 100 metros lisos, todo por una apuesta y por los loles.
Tras el pique verbal, llegó el momento de batirse el cobre en el tartán.
Dicho y hecho.
“It’s game time”, que decía Duplantis en las entrevistas previas.
El estadio Letzigrund de Zúrich estaba abarrotado
En la línea de salida, respira hondo Mondo Duplantis, mientras tanto Warholm bebe agua.
Dos estrellas del atletismo tensas, concentradas como si aquello fuera una final olímpica.
Tacos de salida….
En sus marcas, listos…
¡Vaaaaaaa!
Los primeros metros fueron para el sueco Duplantis, aunque no por mucho.
A mitad de la recta de los 100, quedo una cosa clara, la victoria era suya.
Duplantis consiguió parar el crono en 10.37 mejorando su marca personal de 10.47, vamos que le quito las pegatinas a Warholm.
Como consecuencia de su derrota, el noruego Warholm tendrá que vestir en la Diamond League de Zúrich los colores de Suecia (el perdedor llevaría la indumentaria del ganador)
La verdad que fue un auténtico espectáculo saber cuál de los dos atletas ganaría al otro en un sprint.
Y todo eso en poco menos de 10 segundos.
El resultado, por si te lo perdiste aquí.
Que pases un gran día.
Mariano
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